Exposición con Olivier Desvaux, viajes pictóricos de larga distancia en Cap d'Ail

Una gama de ultramarinos, índigo, azul cielo o turquesa, mezclados con blancos puros y tonos cálidos, marrones u ocres... Como tantos paisajes marítimos de colores contrastantes, bañados por una luz cambiante. Aquellos que dieron nombre a esta exposición. De los Urales a Grecia, de las orillas del Sena a Japón, de las islas de San Pedro y Miquelón a Siracusa, de San Francisco a los fiordos noruegos, Olivier Desvaux, nacido el 12 de mayo de 1982 en Ruan y graduado en 2006 de la Escuela Nacional Superior de Artes Decorativas de París, te invita a un viaje. Y a múltiples paradas, a través del prisma de sus paisajes de gran diversidad, de los que emana una poesía atemporal. Traducido por el artista, contactado por teléfono: «Capturar la realidad, sentir, encontrar la luz inspiradora, la poesía de un lugar. Para mí, es una experiencia con lo vivo, con los elementos, que siempre está en el origen del trabajo en el estudio».
El Sur, su primer patio de recreoUna realidad que, paradójicamente, adquiere un cariz onírico, ya que Olivier Desvaux logra capturar el alma de un lugar, jugando con reflejos y transparencias. ¿Su primer lugar de encuentro artístico? Saint-Tropez, donde su familia poseía una casa, y donde él vivía desde niño: «Empecé a pintar la costa del Var y la Costa Azul desde muy joven, los cálidos colores del interior, tan diferentes de mi Normandía natal. Unas vacaciones exóticas, soleadas y muy inspiradoras». El Mediterráneo no ha dejado de inspirarlo desde entonces: «Cuando me siento frente a un paisaje para pintarlo, la historia del país, de una civilización, le aporta un alma extra. Y siempre necesito ese horizonte. De ahí mi atracción por ciudades portuarias como Tánger, San Francisco, Le Havre o Niza».
Inspiración in situDistinguido con numerosos premios, Olivier Desvaux forma parte de la tradición de la pintura al óleo. En 2018, este explorador de corazón, ávido de intercambio con otros artistas, se unió, para su gran alegría, al círculo restringido de Pintores Oficiales de la Marina Francesa. Mientras aún trabajaba en su estudio, ubicado en un meandro del Sena, en Normandía. De este espectáculo cotidiano, pero también como recompensa por sus innumerables peregrinaciones, en particular a bordo del legendario barco "l'Astrolabe", Olivier Desvaux suele inspirarse en la naturaleza. In situ. Con una especial atracción por las olas, ya sean fluviales, marinas o el reflejo del lago Baikal. "Siempre viajo con poco equipo de pintura, para poder sacar mi caballete y realizar un pequeño estudio en un máximo de 20 a 40 minutos", confiesa . Lo que me interesa es capturar esta sensación in situ, la sutileza de los tonos de luz, y este trabajo me permitirá luego reproducir estos elementos en el estudio, tras un paso atrás. Recomponerlos, con la ayuda de fotografías, dándoles más fuerza y carácter, para finalmente llegar a un formato más grande.
Puesta en abismoSus composiciones se estructuran frecuentemente por aristas arquitectónicas, pero también por una puesta en escena del vacío que marca las obras. Los personajes, por su parte, constituyen una especie de puesta en abismo, ya que simbolizan al pintor contemplando el paisaje, a la vez que nos invitan implícitamente a hacer lo mismo. Tomándose su tiempo y "dejándose llevar por el paisaje" , siguiendo la recomendación del pintor. Para quien lo aparentemente banal puede volverse repentinamente maravilloso bajo el efecto de la luz. En las vitrinas que descubrimos al final de la visita, finalmente, se presentan estudios que dan origen a obras de gran formato creadas en el estudio. Escenas de interiores, retratos de seres queridos, detalles de paisajes o escenas cotidianas capturadas en cuadernos de viaje, revelan aquí otra faceta de su obra, escrutadora, íntima, a menudo tierna, siempre cautivadora.
Alrededor de la exposiciónEl 31 de agosto se ofrecerá un taller de verano de 10:00 a 11:30 h. En torno a la pintura, el collage y las texturas, los niños crearán su propio paisaje tras visitar las obras, supervisados por un profesor de dibujo. (A partir de 6 años). Precio: 10 euros. Inscripción obligatoria: [email protected]. Visitas guiadas para adultos: 19 y 26 de agosto, 2 y 9 de septiembre, de 10:30 a 11:00 h. Con reserva previa. Actividad de verano para niños a partir de 7 años: se invita a los niños a explorar las obras del pintor con la ayuda de siete postales enviadas por el artista. Entrada gratuita.
17 avenue Raymond Gramaglia en Cap d'Ail. Abierto los domingos de 11:00 a 18:00 h. Cierre de puertas a las 17:30 h. Martes, miércoles, jueves y viernes de 9:30 a 12:30 h y de 14:00 a 18:00 h. Cierre de puertas a las 12:00 h y a las 17:30 h. Precios: de 5 a 9 euros. Información: Tel.: 04.93.98.36.57. www.villalescamelias.com/fr/
Var-Matin