La Perrière, o cómo vivir la mejor vida en Perche

"Para vivir felices, vivamos escondidos", el lema nunca ha sido tan acertado para los amantes del Perche . Cuanto más pequeña es la aldea y más perdida está en el bocage normando, más atrae a personajes ilustres, celosos de su tranquilidad. Casi roza el anhelo de anonimato. El codiciado pueblo, apenas visible en el mapa, cabe en un pañuelo. Unas pocas casas, antiguas granjas restauradas o cobertizos utilizados como talleres, albergan generalmente segundas residencias. Pero lo temporal puede convertirse en permanente para quienes se han atrevido. Aunque los llamemos neoruraux , estos habitantes de la ciudad que han huido para vivir su mejor segunda vida no llegan a vestirse de granjeros. Solo de jardineros.

Monique Duveau, una personalidad peculiar, es franca. Esta exestilista gastronómica y autora de varios libros de cocina es una figura emblemática de esta región del Perche, que está siendo repoblada por parisinos. Su libro , "Vivre la campagne" (Vivir en el campo)...