Alimentación. Salud, impacto ambiental... ¿por qué deberíamos priorizar las proteínas vegetales?

El cultivo de leguminosas (garbanzos, lentejas, judías secas, etc.) debe expandirse en Francia. Esta es una de las conclusiones de un informe parlamentario presentado el miércoles. Philippe Bolo, miembro del Partido Demócrata (Les Démocrates) por Maine-et-Loire, y Arnaud Bazin, senador por el Valle del Oise, estudiaron y compararon las proteínas animales y vegetales.
Desde una perspectiva de salud , «es posible estar satisfecho con una dieta basada en plantas, siempre que se cuente con una suplementación adecuada de vitamina B12, calcio, hierro, zinc y, en ocasiones, yodo», señala Arnaud Bazin. Actualmente, solo el 2,4 % de los franceses se identifica como vegetariano y el 0,3 % como vegano. «Estas prácticas son más frecuentes entre las generaciones más jóvenes, lo que sugiere que su proporción en la población aumentará», predice el informe.
Deforestación«No se debe demonizar el consumo de carne , ya que tiene sus virtudes, especialmente en cuanto a la ingesta de proteínas y micronutrientes, y sigue siendo un pilar de la gastronomía», insisten los funcionarios electos. Por lo tanto, la dieta francesa se compone de dos tercios de proteína animal y un tercio de proteína vegetal, mientras que las recomendaciones mundiales son de 50/50.
Por lo tanto, necesitamos consumir más legumbres. Sobre todo porque «la proteína animal tiene un mayor impacto ambiental en general que la proteína vegetal», añade Philippe Bolo. Cabe recordar que la ganadería es responsable del 60 % de las emisiones de gases de efecto invernadero en el sector agrícola, en particular debido a las emisiones de metano procedentes de la digestión animal y al óxido nitroso del estiércol. Además, los animales se alimentan con proteínas vegetales, «cuyas importaciones masivas provocan deforestación», subraya Philippe Bolo. Por ejemplo, entre 2012 y 2021, Francia importó una media de 3,6 millones de toneladas de soja al año. Los mayores productores mundiales son Estados Unidos, Brasil y Argentina, y los países del Mercosur ya la exportan libre de aranceles a la Unión Europea.
Producir más legumbres en nuestro suelo contribuiría, por lo tanto, a diversificar las fuentes de proteínas de la población y a mejorar el impacto ambiental de la ganadería. «Las legumbres también tienen un beneficio agronómico, ya que fijan el nitrógeno del aire en el suelo, evitando la necesidad de fertilizantes», señala el informe. Sin embargo, en 2023, las legumbres representaban menos del 4 % de la superficie agrícola cultivada en Francia. Por lo tanto, los parlamentarios piden «establecer un objetivo de autonomía proteica para la ganadería, si no en Francia, al menos a escala europea». Proponen varias vías para ello: «Desplegar al máximo las ayudas asociadas a la PAC [Política Agrícola Común], fomentar las leguminosas forrajeras y desarrollar la investigación varietal, ya que las leguminosas no se han beneficiado de los mismos esfuerzos de las empresas de semillas que los cereales».
También recomiendan continuar la experiencia con menús vegetarianos en los comedores escolares y que las autoridades públicas "comuniquen sobre la importancia de utilizar fuentes variadas de proteínas en el próximo Plan Nacional de Nutrición y Salud".
Le Bien Public