¿Quién llora a Capitán Bitcoin?

¿Qué es doxear? Según la Real Academia Española, el doxing es la acción de buscar y publicar información privada o sobre la identidad de una persona en internet, generalmente con la intención de causarle daño. No existe equivalente oficial en castellano, aunque a cualquiera le vienen a la mente términos como desenmascarar, descubrir, exponer, revelar… El debate sobre el anonimato en las redes sociales no es nuevo y hay teorías para todos los gustos. ¿Sirve para proteger la libertad de expresión o para atacar impunemente y sin límites a quien convenga?

Entre el apagón de un lunes y el parón del lunes siguiente se ha doxeado a los responsables de cuentas que actuaban de altavoces de la ultraderecha. @CapitanBitcoin, con más de medio millón de seguidores, ha bajado la persiana tras desvelarse su identidad real -es un joven enfermero negacionista de las vacunas- y hasta la de su orgulloso padre, que asegura ahora que era seguidor del Capitán en X supuestamente sin saber que era su hijo.

Autor de libros contra “la dictadura progre”, cocinero de bulos durante la dana, productor de fakes sobre los ataques de Israel en Gaza y agitador de canales de Telegram... “Españoles, el @CapitanBitcoin ha muerto”, escribe un tuitero con la imagen de Carlos Arias Navarro.

El responsable del doxeo es @wiesenthal1632, que actúa como Simon Wiesenthal, el cazanazis judío, que tras ser prisionero en Mauthausen dedicó la mayor parte de su vida a perseguir a los nazis que evadieron la justicia. No hay contraataque posible porque su identidad es pública. “Tira del hilo” con su nombre y apellidos en diario.red de Pablo Iglesias.

El doxeo y sus capítulos se sigue como una serie de Netflix en X, hay boomers que confiesan estar más enganchado que a Lost. El siguiente en ser descubierto es el titular de la cuenta Capitán General de los Tercios @capTercio, con 152.000 seguidores, y está en camino la identidad de @Capitana_espana, que ha intentado ponerse la tirita antes de la herida y ha pedido ayuda hasta a Ana Rosa Quintana. Los ultras de Hazte Oír han salido al rescate y han recibido con la vara ministerial de Óscar Puente: “Ultraderechita cobardica y llorona”.

El ministro defiende el doxeo de cuentas: “”Esta gentuza que jaleaba a los que publicaban fotos de nuestras hijas menores de edad, anda muy soliviantada porque se desvela la identidad real que ocultaban para insultar y difamar. Son unos valientes”. Mientras, quienes se han convertido en inesperado objetivo en las redes tras años de impunidad a la hora de atacar, mentir y vejar, apelan a Elon Musk en X sin que se conozca respuesta: “¿Vas a hacer algo al respecto?”

@SrLiberal, 142.000 seguidores, fue descubierto el mes pasado. Es un abogado madrileño, seguidor de Vox, pero que ya formó parte de la nonata candidatura liderada por José Emilio Rodríguez Menéndez. El letrado ha abierto un crowdfunding para hacer frente a un supuesto acoso judicial por parte de la izquierda. “Si me quieren destruir, tendrán que enfrentarse a todos nosotros”, proclama. “Solicito el apoyo de España”. Y su España responde: 2.853 euros recaudados a media tarde de ayer. El objetivo eran 5.500 euros.

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Desenmascarar cuentas anónimas no es la solución al extremismo en las redes, donde muchos se parapetan tras el derecho a la disidencia política para desarrollar actividades que vienen claramente definidas en el Código Penal. Delitos de odio, contra el honor, contra la intimidad... Falta regulación, sistemas de verificación y educación digital. Mucha educación. Y mientras los ultras lloran a @CapitanBitcoin, ¿alguien que doxee al misterioso M. Rajoy?