La espectacular biblioteca de Inglaterra donde se rodó una de las escenas románticas de 'Mi año en Oxford'

Las comedias románticas están viviendo una nueva edad de oro en España (y en todo el mundo) gracias a las plataformas de streaming. Series como El verano en que me enamoré, en Prime Video, o cintas como la trilogía de A todos los chicos de los que me enamoré, también escrita por Jenny Han, han causado un resurgir del género al que ha contribuido Mi año en Oxford (2025), la nueva película original de Netflix.
La cinta protagonizada por Sofia Carson adapta la novela homónima escrita por la también actriz Julia Whelan, y en España lleva siendo la película más vista en Netflix (de habla inglesa) durante varias semanas. Casi todas las escenas de la película, como no podía ser de otra manera, se rodaron en la propia ciudad de Oxford, aunque hay un lugar de la urbe que sobresale tanto por su belleza como por su importancia.
La Biblioteca Bodleiana en OxfordLa Biblioteca Bodleiana es uno de los edificios más importantes tanto de la ciudad de Oxford como de la propia película de Netflix, y es que este monumental lugar es la principal biblioteca de investigación de toda la universidad. Además de ser la segunda más grande de toda Inglaterra (solo por detrás de la Biblioteca Británica), también es una de las más antiguas de toda Europa, por lo que su importancia es inconmensurable.
Este impresionante monumento fue inaugurado en el año 1602, y a lo largo de sus casi 425 años de historia ha acogido a miles de estudiantes universitarios en sus salas. Además de ser una de las cinco bibliotecas inglesas de depósito de derechos de autor, cuenta con edificios tan excelsos como la célebre Cámara Radcliffe, uno de los puntos más emblemáticos del Reino Unido y que hoy en día es una sala de lectura.
Otra de las partes más impactantes de la Biblioteca Bodleiana, que recibe su nombre del coleccionista de libros Thomas Bodley (quien donó 2.000 ejemplares para su inauguración), es sin duda la majestuosa Torre de los Cinco Órdenes, un increíble torreón con columnas de hasta cinco estilos arquitectónicos clásicos distintos. Esa es solo una de las joyas de esta inmensa obra que alberga millones de ejemplares, algunos de un valor incalculable.
La impresionante belleza del edificio ha llamado la atención de muchos cineastas a lo largo de la historia, apareciendo en películas como las dos primeras entregas de Harry Potter o, ahora, Mi año en Oxford. En la cinta de Netflix, este tesoro es uno de los muchos que quiere descubrir la protagonista en la ciudad universitaria por antonomasia, y de hecho consigue entrar en otra de las maravillas de la biblioteca como es la imponente Biblioteca Duke Humfrey, una de sus salas más asombrosas.
20minutos