Maresca, misión cumplida: su Chelsea está en la final como claro favorito

Misión cumplida: el Chelsea está en la final de la Conference League, la copa en la que es claro favorito y que disputará ante el Real Betis el 28 de mayo en Wroclaw, Polonia. El regreso a Stamford Bridge ante el Djurgarden sueco, acompañado en Londres por casi 5.000 aficionados entusiastas, fue poco más que un trámite tras el 4-1 de la ida en Estocolmo, pero Maresca había pedido a sus jugadores que evitaran hacer el ridículo como el del Legia de Varsovia en la vuelta de cuartos de final (derrota 2-1 tras el 3-0 de la ida y abucheos de la grada) y esta vez el Chelsea hizo caso a su técnico, controlando el partido y cerrando con el 1-0 de Kiernan Dewsbury-Hall en el minuto 38. Nada del otro mundo, pero una victoria que permite al Chelsea centrarse en el sprint hacia la Champions League desde la Premier League: esta copa que no pueden dejar de ganar volverá al radar después del final del campeonato.
Incluso en la versión B, el Chelsea es claramente superior al Djurgarden, que disputa en Inglaterra su primer partido europeo como visitante de su historia. Maresca confió esa misión a jóvenes como Reggie Walsh, con 16 años y 200 días el titular más joven en Europa en la historia de los Blues, y como los dos jóvenes de 19 años Josh Acheampong y Tyrique George, que inventaron la asistencia para el gol de la victoria. El partido también permitió experimentos, con Marc Cucurella como centrocampista junto a Reece James y Malo Gusto como extremo derecho en lugar de lateral. Funcionó bien tanto porque, experimentos aparte, el Chelsea ahora domina plenamente el estilo Maresca, como por la debilidad del oponente. Aunque el equipo B es el que llegó a la final con un palmarés triunfal con 42 goles marcados y 10 encajados, con 11 victorias en 12 partidos (la única excepción fue el partido de vuelta ante el Legia de Varsovia), es probable que Maresca pida a sus titulares que ganen la Copa. Lo que le queda al Djurgarden es la fiesta, la primera semifinal europea de su historia, el calor de la afición que animó un desafío por lo demás sin sentido en Stamford Bridge. Equipos como el Chelsea siguen estando fuera de su alcance, incluso si utilizan reservas.
El Chelsea tomó el control del partido desde el principio, pero tuvo que esperar hasta el minuto 38 para adelantarse, cuando una espléndida idea de George permitió al Dewsbury-Hall colarse entre los dos centrales del Djurgarden y batir a Rinne con un disparo de billar. Maresca vuelve a ser titular con Mhueka, de 17 años, en lugar de Cucurella, uno de los titulares que se reservan para el campeonato: los Blues mantienen el control del juego, Djurgarden es más emprendedor, los Blues tienen otras oportunidades pero el resultado ya no cambia. Y el Chelsea jugará el 28 de mayo su primera final europea desde 2021. Con la obligación de ganarla.
La Gazzetta dello Sport