EE.UU. cancela casi 500 millones de dólares en subvenciones para vacunas de ARNm y alerta sobre su seguridad

En una decisión que ha generado amplio debate y consternación en el ámbito científico, el secretario de Salud de Estados Unidos, Robert F.Kennedy JR., anunció la cancelación de casi 500 millones de dólares en subvenciones y contratos destinados al desarrollo de vacunas ARNm. Esta tecnología resultó fundamental en la rápida respuesta contra la pandemia de COVID-19, permitiendo el desarrollo y la producción acelerada de las vacunas como las de Pfizer-BioNTech y Moderna.
El anuncio incluye la cancelación de 22 proyectos que estaban siendo financiados a través de la Autoridad de Investigación y Desarrollo Biométrico Avanzado(BARDA), la agencia encargada de promover el desarrollo de tecnologías biomédicas para enfrentar amenazas senitarias emergentes. Esta medida se suma a la revocación en mayo de un contrato de cerca de 600 millones de dolares con Moderna para la creación de una vacuna contra la gripe aviar, también comunicada por el Departamento de Salud y Servicios Humanos.
El secretario explicó que va a destinar esa financiación a «plataformas de vacunas mas seguras y amplias que mantengan su eficacia incluso con las mutaciones de virus». En un video compartido en redes sociales poco despues del anuncio, afirmó erróneamente que las vacunas de ARNm no protegen contra enfermedades respiratorias como el COVID-19 o la gripe, y que la rápida mutación de estos virus hace que las vacunas se vuelvan ineficaces con una sola mutación. «Como nos mostro la pandemia, las vacunas de ARNm no funcionan bien contra los virus que infectan el tracto respiratorio superior», manifestó en el video.
A diferencia de las vacunas tradicionales, que a menudo utilizan formas debilitadas o inactivadas del virus o la bacteria objetivo, las inyecciones de ARNm introducen instrucciones genéticas en las células del huésped, lo que las incita a producir un señuelo inofensivo del patógeno y capacita al sistema inmunitario para combatir el patógeno real.
Las pioneras de esta tecnología, Katalin Kariko y Drew Weissman, recibieron el Premio Nobel de Medicina 2023 por su contribución al ritmo sin precedentes de desarrollo de vacunas durante una de las mayores amenazas para la salud humana en la era moderna. La reducción presupuestaria y el cambio de enfoque tecnológico han causado alarma en científicos y expertos en salud pública.
abc